Triste pero cierto 2

Este oscuro y torvo personaje se autodefine como “un Che Guevara en Mercedes Benz”, ha dado muestras de ser un hombre muy limitado, de nula inteligencia y pésimo gusto, malos modales y mala educación; su alter ego es una botarga que acosa a las modelos en sus comerciales televisivos; trata a la gente pobre como si fuesen perros callejeros que le inspiran lástima; lucra con la necesidad, aprovechándose de las deficiencias del sistema de salud y miente con descaro cuando lo entrevistan (a juzgar por lo poco que se le entiende). Si hubiera un personaje que combinara las características de Vicente Fox y Hugo Chávez, él sería su versión “similar”. En suma, tiene todos los defectos de la clase política que crítica, y ninguna de sus virtudes. Simple y sencillamente es lo mismo, pero más barato. Muchísimo más barato.
Y puede ser, gracias a nuestra corrupta manera de entender la política y la democracia, candidato a la presidencia de la república.