Dándolo mantenimiento a mi carpeta de textos, me encontré que alguna vez escribí esto a propósito de uno de mis fetiches: Kylie Minogue. Pero por alguna razón, no lo subí al blog. Pero creo que debo hacerlo, esperando honestamente, que la salud de mi querida sex symbol haya mejorado. De el texto original han pasado dos meses.
La sordidez y el underground no son todo en la vida
Para que vean que en este blog no sólo se habla de Trainspotting y Roxy Music, y para los que crean que toda cosa que escribo está contaminada de mi gusto por las bebidas punzocortantes, el sexo y el rock and roll, voy a dar una buena nueva.
Kylie Minogue venció el cáncer de mama.
Contaba yo con tan sólo 15 añitos cuando una lagartona de 22 me llevó al cine Fernando Soler (hoy convertido en un espantoso Elektra) y estrenó mis labios para desatar una lujuria que me acompaña hasta la fecha. Esa fue la primera vez que besé a una mujer. Ya estaba bastante grandecito, lo acepto. Pero la espera valió la pena pues la chica en cuestión cumplía con varios de mis fetiches: era pelirroja, tenía la piel muy blanca, y estaba loca. Besaba muy bien, por otro lado,pero eso será tema de otro post.
La anécdota viene a colación pues aquella vez fuimos a ver (es un decir) una filme titulado Amor ilícito. Protagonizado nada más, ni nada menos que por la estrella adolescente del pop de entonces: Kylie Minogue.
Desde entonces me ha parecido una de las mujeres más cachondas sobre la tierra. ¿Cómo olvidar el besotote que se dio en los labios con la ex Spice girl Geri Halowell*, que años después fusilarían vilmente Madonna y Britney Spears?, ¿Cómo olvidarla en el video donde sale con un chiquivestido de espejitos, o bien cuando era novia del mismísimo Nick Cave y grabaran un video con ella “muerta” en el fondo de un lago, completamente pálida y con los labios de un rojo encendido? mención aparte merece su aparición como personaje en un cuento de Irvine Welsh que es muy divertido.
Cuando me enteré que la Minogue padecía de cáncer, me lamenté profundamente (con personajes como Paulina Rubio libres por el mundo, haciendo ridículos y gozando de cabal salud, no me parecía justo). Hoy leo con beneplácito que se ha recuperado y participó con su Dani Minouge (su hermana, otro bombón) en un concierto.
Así pues, tenemos Kylie Minogue para rato. Dejo a su consideración, una bonita imagen de la susodicha:
Para que vean que en este blog no sólo se habla de Trainspotting y Roxy Music, y para los que crean que toda cosa que escribo está contaminada de mi gusto por las bebidas punzocortantes, el sexo y el rock and roll, voy a dar una buena nueva.
Kylie Minogue venció el cáncer de mama.
Contaba yo con tan sólo 15 añitos cuando una lagartona de 22 me llevó al cine Fernando Soler (hoy convertido en un espantoso Elektra) y estrenó mis labios para desatar una lujuria que me acompaña hasta la fecha. Esa fue la primera vez que besé a una mujer. Ya estaba bastante grandecito, lo acepto. Pero la espera valió la pena pues la chica en cuestión cumplía con varios de mis fetiches: era pelirroja, tenía la piel muy blanca, y estaba loca. Besaba muy bien, por otro lado,pero eso será tema de otro post.
La anécdota viene a colación pues aquella vez fuimos a ver (es un decir) una filme titulado Amor ilícito. Protagonizado nada más, ni nada menos que por la estrella adolescente del pop de entonces: Kylie Minogue.
Desde entonces me ha parecido una de las mujeres más cachondas sobre la tierra. ¿Cómo olvidar el besotote que se dio en los labios con la ex Spice girl Geri Halowell*, que años después fusilarían vilmente Madonna y Britney Spears?, ¿Cómo olvidarla en el video donde sale con un chiquivestido de espejitos, o bien cuando era novia del mismísimo Nick Cave y grabaran un video con ella “muerta” en el fondo de un lago, completamente pálida y con los labios de un rojo encendido? mención aparte merece su aparición como personaje en un cuento de Irvine Welsh que es muy divertido.
Cuando me enteré que la Minogue padecía de cáncer, me lamenté profundamente (con personajes como Paulina Rubio libres por el mundo, haciendo ridículos y gozando de cabal salud, no me parecía justo). Hoy leo con beneplácito que se ha recuperado y participó con su Dani Minouge (su hermana, otro bombón) en un concierto.
Así pues, tenemos Kylie Minogue para rato. Dejo a su consideración, una bonita imagen de la susodicha:
Si las australianas promedio son como Kylie Minogue, Naomi Watts y Nicole Kidman, no se que chingados hago en este país lleno de panistas y de nacos.
*Esa imagen merecería aparecer en la sección Grandes Momentos en la Historia de la Humanidad.
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